Antecedentes Históricos de Pavimentos

De Construmatica

Logo tecnopavimento.png Nota: Este artículo ha sido creado gracias a la Tecnopavimento en el marco del Programa de Afiliados de la Construpedia. El contenido está disponible en el sitio web de Tecnopavimento

¡Atención! Esté artículo está sujeto a Derechos de Autor.


Desde que los hombres aprendieron a vivir en comunidad y en asentamientos estables, la búsqueda de materiales y procesos constructivos para conseguir una pavimentación más confortable y duradera ha sido una inquietud constante.

Desde piedras naturales, pasando por adoquines de madera, arcilla prensada a mano y cocida... han sido muchos los tipos de materiales empleados en la pavimentación a lo largo de los siglos. Al principio los criterios eran fundamentalmente prácticos y, una vez resueltos éstos, fueron complementados por criterios más refinados en los que la belleza y el diseño cobraron mayor relevancia.

Mosaicos

Buen ejemplo de ello es la pavimentación con mosaicos, que, procedentes de Oriente, fueron introducidos en Europa por los griegos, y divulgados por los romanos. Estos mosaicos se realizaban combinando pequeñas piezas de mármol y piedras naturales que se fijaban entre sí y al suelo utilizando cemento natural a base de cal.

Piedra Artificial

Con la aparición en 1824 del Cemento Portland, así denominado por su inventor el inglés Joseph Aspdin, se posibilitó la producción de Piedra Artificial, como elemento constructivo que permite obtener piezas de formas muy diversas mediante procesos industrializados, mejorando el comportamiento de los productos de pavimentación y dando respuesta a las necesidades de un creciente mercado.

Mosaico Hidráulico

La tecnología de la piedra artificial dio paso al Mosaico Hidráulico, antecedente del Terrazo, que desde el último cuarto del siglo XIX ha sido el material más usado y de mayor calidad con que se ha pavimentado los suelos de las viviendas y que aún se siguen utilizando.

Clicar para ampliar

Muchos y variados han sido los modelos de mosaico hidráulico, existiendo verdaderas obras de arte que incorporan dibujos sofisticados (realizados con cemento coloreado y extendido en moldes bruñidos de acero con trepas especiales) que podrían emular a las alformbras orientales.

El proceso de fabricación de este material, que aún pervive, tiene un gran componente artesanal, lo que limita su producción.

Producción Industrial y Aparición del Terrazo

Con el desarrollo industrial en el sector de los materiales para la construcción, apareció una nueva tipología de maquinaria y proceso de fabricación, que sin perder las posibilidades creativas del mosaico hidráulico, permitieron mejorar las características mecánicas de las baldosas y producirlas en series mayores, naciendo el terrazo.

Clicar para ampliar

El terrazo en forma de baldosas permite aglutinar piedras naturales (de cantos rodados, granitos y/o mármoles triturados) mezcladas entre sí y con cemento Portland, habitualmente coloreado que, una vez endurecido, permite obtener diferentes acabados superficiales para presentar una superficie lisa o rugosa y resaltar las formas y colores de sus componentes.

Su superficie externa puede ser sometida a numerosos tratamientos mecánicos secundarios industrializados que aumentan sus posibilidades estéticas y funcionales.

Las formas, colores y texturas, y sus combinaciones finales, permite la obtención de pavimentos variados en los que, además, se puede conseguir la funcionalidad prevista sin limitaciones en las posibilidades de diseño.

El uso de terrazo se generalizó en España a partir de la década de los 60, cuando consiguió moldear y producir piezas en procesos de fabricación automatizados que ofrecían un producto de lata calidad y belleza a precios competitivos.

Casi toda la pavimentación de viviendas, locales comerciales y áreas peatonales entre los '60 y '80 estaban constituidas por baldosas prefabricadas de hormigón. A partir de los años 80, el terrazo ha mantenido su supremacía en la pavimentación de áreas comerciales y espacios peatonales, a pesar de la incorporación en el mercado de otros materiales.

Sus características mecánicas, superiores a otros productos, lo hacen idóneo para cualquier uso interior, toda vez que pueden adaptarse estas características a los requerimientos de la superficie a pavimentar. En pavimentación exterior, las baldosas prefabricadas de hormigón siguen siendo las más utilizadas.

Con el desarrollo del terrazo, adaptándolo a los requerimientos de uso exterior, crecieron sus posibilidades de diseño, enriqueciendo la estética urbana.

Clicar para ampliar

Requerimientos del Terrazo para Interior y Exterior

Tecnopavimento en uso exterior

Debidos a sus ventajas el uso del terrazo se ha incrementado tanto en el interior como en el exterior. Nuevos modelos se han ido desarrollando para dar respuesta a los crecientes requerimientos: mayores exigencias mecánicas, resistencia a la abrasión y al deslizamiento, pavimentos táctiles, todo sin perder las posibilidades de diseño combinando formatos y colores.

Tecnopavimento es la evolución de los productos prefabricados de hormigón para pavimentar, con estándares de calidad y diseño muy avanzados, controles estrictos de fabricación e incorporación de nuevos modelos alcanzados por actividades de investigación y desarrollo.

Artículos Relacionados

Enlaces Externos