Vados Peatonales

Revisión del 15:30 13 ago 2008 de imported>Monylit (→‎Artículos Relacionados)
(difs.) ← Revisión anterior | Revisión actual (difs.) | Revisión siguiente → (difs.)
Logo abenor.jpg Nota: Este artículo ha sido creado gracias a la ABENOR en el marco del Programa de Afiliados de la Construpedia. El contenido está disponible en el sitio web de ABENOR

¡Atención! Esté artículo está sujeto a Derechos de Autor.


Definición

Se denominan Vados Peatonales a las modificaciones de las zonas de un itinerario peatonal, mediante planos inclinados que comunican niveles diferentes, que facilitan a los peatones el cruce de las calzadas destinadas a la circulación de vehículos.

Un vado peatonal se considera accesible cuando puede ser utilizado de forma autónoma y segura por todas las personas, tengan o no alguna discapacidad.

La Pendiente longitudinal de un vado o de un itinerario peatonal se define como la inclinación del terreno, acera o cualquier estructura de paso, en el sentido de la marcha.

La Pendiente transversal de un vado o de un itinerario peatonal se define como la inclinación del terreno, acera o cualquier estructura de paso, en la dirección perpendicular al sentido de la marcha.

La Anchura del vado es la dimensión del espacio o ámbito de paso, en el sentido del cruce de la calzada, que mantiene la continuidad, sin resaltes ni cambios de nivel a lo largo del recorrido. Coincide generalmente con la longitud de la línea de intersección entre el plano inclinado principal del vado y la calzada.

 
Clicar para ampliar

Los diferentes parámetros que definen un vado han sido regulados por las normativas autonómicas de accesibilidad. La tabla siguiente aporta los citados parámetros establecidos por la legislación vigente:

Vados Peatonales : Parámetros de las Legislaciones Autonómicas anteriores al 01/ 01/2000.

 
Clicar para ampliar

De la tabla anterior podemos deducir el concepto de vado modelo, que cumpliría simultáneamente todos los requisitos de las normativas autonómicas, exceptuando la de Cantabria, que obliga a pendientes longitudinales máximas del 6% y la de navarra en lo que se refiere a recorridos intensivos (nivel I).

Vado Modelo

Es el vado cuyos planos inclinados poseen una pendiente longitudinal máxima del 8%, una pendiente transversal no superior al 2%, sin desnivel entre acera y calzada en la zona donde se produce el cruce de los peatones y con una anchura mínima de paso de 1,80 m.

Clasificación de Vados

Los vados se pueden clasificar de diversas formas: en función de los materiales con que se han construido (vados de piedra, de hormigón, etc.); según el sistema de ejecución (vados prefabricados, construidos in situ, etc.); según la ubicación en el medio urbano (vados en banda peatonal, en orejeta, etc); en función de la diferencia de nivel que superan , etc.

Atendiendo a la diferencia de nivel] que exista entre el plano del itinerario peatonal y el de la circulación rodada, se pueden establecer los siguientes tipos de vado:

  • Vado de Resalte
  • Vado de Cambio de Nivel
  • Vado de Ruptura de Nivel

Atendiendo a su forma y en función del número de planos inclinados que los componen, los vados se pueden clasificar en los siguientes tipos:

  • Vado de Tres Rampas
  • Vado de Dos Rampas
  • Vado de Una Rampa

Vado de Resalte

Constituye el límite conceptual mínimo de vado, y se puede definir como la modificación que sufre un itinerario peatonal para comunicar dos superfices cuya diferencia de nivel no supera los 3,00 cm.

Este tipo de vado suele hallarse en calles de plataforma única en las que, si bien no deberán existir diferencias de nivel entre las distintas franjas de circulación, es frecuente encontrar resaltes en la separación de las mismas.

Otro caso suele producirse en los vados en los que la calzada se eleva hasta alcanzar el nivel de la acera. El encuentro de ambas ha de realizarse mediante un plano inclinado de pendiente no superior al 25%, suele tratarse de bordillos achaflanados, que además sirven para indicar el cambio de situación de la acera a la calzada a las personas ciegas o con deficiencia visual cuando las texturas de las mismas no está suficientemente diferenciadas.

En el caso en que es desnivel entre acera y calzada no supere los 2,00 cm, la mayor parte de las legislaciones autonómicas admiten el achaflanado del bordillo de encuentro sin especificar la pendiente.

 
Clicar para ampliar

Los pasos peatonales con vados de resalte, suelen utilizarse cuando se desea aminorar la velocidad de circulación de los vehículos, que queda condicionada por los cambios de pendiente de la calzada.

 
Clicar para ampliar

La existencia del plano inclinado que resuelve el resalte, evita en gran medida el encharcamiento del vado en días de lluvia, y proporciona un margen para la ejecución de nuevas capas de asfalto sobre la calzada sin superar el nivel de la acera.

 
Clicar para ampliar

Vado de Cambio de Nivel

Es el caso más frecuente; el cambio de nivel corresponde a la altura habitual de los bordillos de las aceras que no suelen superar los 15 cm, y están formados por planos inclinados que confluyen para alcanzar la cota de la calzada.

 
Clicar para ampliar

Vado de Ruptura de Nivel

Se trata de vados de diseño singular, que se construyen para superar alturas de más de 15 cm. Suelen ser vados de morfología completa, que se apartan de las soluciones convencionales normalizadas y que se utilizan en puntos conflictivos de las estructuras urbanas antiguas (aceras escalonadas, topografías complicadas...)

La imagen siguiente muestra una acera escalonada en el casco antiguo de la ciudad de Puertollano (Ciudad Real).

 
Clicar para ampliar

Vado de Tres Rampas

Son los más usuales y se conforman mediante tres planos inclinados, con el 8% de pendiente máxima, que confluyen hasta alcanzar la cota de la calzada. Se pueden construir cuando la acera en la que se sitúan es lo suficientemente amplia para permitir una banda libre peatonal no afectada por el vado de, al menos, 0,90 m de ancho.

 
Clicar para ampliar

Solución de tres rampas con bandas señalizadoras laterales:

 
Clicar para ampliar

La foto siguiente muestra un paso peatonal con vado de tres rampas. La instalación de bolardos supone un obstáculo para personas ciegas o con deficiencias visuales:

 
Clicar para ampliar

En la foto siguiente se muestra un vado de tres rampas con dos bandas señalizadoras laterales, construido con pavimento de botones de color contrastado con el itinerario peatonal en que se ubica:

 
Clicar para ampliar

Vado de Dos Rampas

Se deben construir en aceras estrechas (ancho menor o igual a 2,50 m), y consisten en hacer descender todo el ancho de la acera mediante dos planos inclinados, con el 85 de pendiente máxima, hasta alcanzar el nivel de la calzada.

 
Clicar para ampliar

En este tipo de vado no se colocan franjas señalizadoras y, únicamente se construye la totalidad de la superficie ocupada por el vado con pavimento de textura y color diferente.

 
Clicar para ampliar

Vado de Una Rampa

Están formados por un único plano inclinado, con el 8% de pendiente máxima, y los consiguientes cuchillos laterales, que han de protegerse con barandillas o cualquier otro elemento de mobiliario urbano. Deben permitir una banda libre peatonal no afectada por el vado característico de la ciudad de Barcelona.

 
Clicar para ampliar

Vados en Esquina

 
Clicar para ampliar

No se recomiendan los vados en esquina ya que pueden inducir a las personas ciegas a cruzar la calle en diagonal, provocándoles peligro y desorientación.

Se deben realizar únicamente en aceras muy estrechas, cuando resulta imposible efectuar el giro de 90º con la silla de ruedas.

En la figura de la derecha se representa el cruce de dos calles con vados en esquina .

Este tipo de solución no es aconsejable, a excepción de los casos en que se trate de calles muy estrechas de los cascos urbanos con escaso tráfico de vehículos.

En el gráfico que sigue se incorpora al vado la señalización del paso peatonal paso de cebra, porque no resulta conveniente efectuar el cruce por la esquina.

 
Clicar para ampliar


En este caso habrá que alejar los planos inclinados que conforman los vados del encuentro de las alineaciones de las dos fachadas, al menos una distancia de 1,50 m, para posibilitar el giro de 90º de una silla de ruedas sin invadir la calzada. Se recomienda instalar una barandilla de protección rodeando el perímetro de la esquina situada en el borde exterior de la acera.

En los cruces de calles con aceras de ancho comprendido entre 1,20 y 2,50 m, se ejecutan frecuentemente vados de una rampa en el sentido de la marcha y se rebaja toda la esquina al nivel de la calzada. En estos casos, conviene proteger el perímetro de dicha esquina con una barandilla para evitare que las personas ciegas crucen en diagonal y se dirijan al centro de la calzada.

Los tipos de vados descriptos anteriormente precisarán, en todos los casos, y exceptuando el vado de dos rampas, de las correspondientes bandas señalizadoras de pavimento diferenciado para indicación a personas ciegas o con deficiencias visuales, siguiendo los criterio que marque la normativa autonómica de accesibilidad que corresponda.

En cuanto a las pendientes de los planos inclinados, no todas las normativas las limitan al 8% y en varias autonomías se admite hasta el 12%. Recomendamos no obstante, no superar el 8%.

El gráfico muestra pasos peatonales con esquina rebajada:

 
Clicar para ampliar

Otros Tipos de Vados

Los vados han de adaptarse a las diferentes situaciones particulares que se producen en el medio urbano, y así surgen diferentes subtipos que se generan a partir de los criterios generales de diseño.

La imagen siguiente muestra un paso peatonal con vado de tipología mixta en la ciudad de Sidney:

 
Clicar para ampliar

Por otra parte, algunos municipios han creado con mayor o menor éxito sus propios modelos de vado, como en el caso del vado tipo Barcelona o el vado de durogranito abujardado prefabricado que se ha instalado en varios municipios de la comunidad de Castilla, La Mancha.

 
Clicar para ampliar

Requisitos de Diseño

  • Se ejecutarán con pavimento de textura y color diferente al del itinerario peatonal donde se encuentren ubicados, contrastando además con el asfalto de la calzada. Contarán con franjas señalizadoras de 1,20 m ancho que, en general, se construyen con el mismo pavimento que el utilizado para los vados. Existen dos criterios de colocación de franjas señalizadoras:
  1. Banda señalizadora central, atravesando todo el ancho de la acera e indicado en el centro del vado.
  2. Dos bandas señalizadoras en los extremos dle vado, igualmente atravesando todo el ancho de la acera.
  • En caso que existan cuchillos laterales (vado tipo Barcelona), se protegerán con mobiliario urbano tales como papeleras o semáforos, para evitar el peligro que supone el brusco cambio de nivel.
  • El ancho del vado y las pendientes longitudinal y transversal máximas de los planos inclinados que lo conforman, serán determinados por la normativa autonómica de accesibilidad que sea de aplicación.
  • Se evitará en encharcamiento del vado, mediante rígolas o sumideros adecuadamente situados.
  • El encuentro entre acera y calzada en la zona donde se efectúa el cruce de los peatones, ha de realizarse a la misma cota. En caso que acera y calzada no estén enrasadas en dicha zona, se pueden producir dos situaciones.
  • Si el desnivel no supera los 2 cm, se achaflanará o redondeará el canto del bordillo para que no suponga una barrera para personas que utilicen silla de ruedas.
  • Si el desnivel está comprendido entre 2 y 3 cm, se achaflanará el encuentro con una pendiente del 25%. En el caso dle bordillo achaflanado para vados peatonales que ha normalizado el Ayuntamiento de Madrid, se utiliza el 23%.

Artículos Relacionados

Enlaces Externos