Manejos de Herramientas y Equipos

LogoFLC.PNG Nota: Este artículo ha sido creado gracias a la Fundación Laboral de la Construcción en el marco del Programa de Afiliados de la Construpedia. El contenido pertenece a la publicación Manual de Ergonomía en la Construcción, disponible en el sitio web Línea Prevención.

¡Atención! Esté artículo está sujeto a Derecho de Autor. © Fundación Laboral de la Construcción, 2004.


Problemas:

Hay diversos factores que pueden afectar a la salud y la eficiencia en el trabajo cuando se usan herramientas manuales.

  • Tiempo de uso de la herramienta: cuando los músculos permanecen en tensión estática durante largos periodos de tiempo.
  • Posturas forzadas de trabajo: ocasionados por la herramienta, por la dificultad de alcanzar la zona de trabajo o por el espacio reducido.
  • Peso de la herramienta: las herramientas más pesadas demandan más esfuerzo para manejarlas.
  • Vibración: herramientas como los martillos neumáticos, amoladoras y otras herramientas eléctricas que producen un elevado nivel de vibraciones.
  • Repetitividad: cuando los mismos músculos son empleados de manera repetida o durante periodos prolongados.

Recomendaciones:

  • Usar herramientas eléctricas en vez de manuales, cuando sea posible. De esta manera se reduce el esfuerzo realizado en manos, brazos y espalda y se realizan menos movimientos repetitivos.
  • Las herramientas han de estar en buenas condiciones. Es necesario asegurarse de que la herramienta esté bien conservada: herramientas no afiladas o defectuosas pueden ser más peligrosas además de requerir un esfuerzo mayor para manejarlas;
- Mantener las herramientas limpias, lejos del agua, aceites, substancias químicas y superficies calientes que las puedan dañar.
- Inspeccionar las herramientas todos los días antes de usarlas. Revisar el filo, picaduras, deformaciones y desgaste. Asegurarse de que los tornillos y tuercas estén apretados. No usar herramientas dañadas o defectuosas.
  • La herramienta ha de ajustarse a la tarea y a las características individuales:
- Elegir herramientas que se puedan agarrar confortablemente. Para ello el mango ha de ser cómodo: un buen mango protege la mano del contacto con la superficie de la herramienta. Hay que evitar los mangos cortos que acaban en la palma de la mano.
- Intentar no utilizar la herramienta con las muñecas dobladas.
- Dar descanso a la mano de vez en cuando durante el día. Hasta la herramienta ideal puede terminar produciendo lesiones si se usa repetidamente. Cuando no se utilice hay que dejar la herramienta a un lado.
- Una sola herramienta no puede hacerlo todo. En ocasiones es necesario usar varias en función de la altura de trabajo Si se utiliza una herramienta para realizar un trabajo para el cual no fue diseñada, el esfuerzo será mucho mayor.
A destacar: ¿Mango recto o tipo pistola?
Una misma herramienta puede tener orientaciones del mango diferentes. Las más habituales son el mango recto (por ejemplo, un destornillador común) y el mango "tipo pistola" (por ejemplo, un taladro). A la hora de decidir entre ambos hay que considerar los siguientes factores:
  • La altura a la que hay que trabajar.
  • La orientación de la superficie de trabajo (horizontal o vertical).

Considerando estos factores, algunas situaciones comunes son las siguientes: