La transición ecológica llega a las carreteras españolas
España es uno de los países líderes en la lucha contra el cambio climático y la transición hacia una economía más sostenible. En este sentido, las carreteras juegan un papel fundamental en la consecución de estos objetivos ya que son el soporte del tráfico rodado, importante fuente de emisiones de gases de efecto invernadero en el país. Por ello, un adecuado mantenimiento de las carreteras es determinante para lograr esa transición hacia una forma de transporte ecológica y sostenible.
Por esta razón, en los últimos años se han puesto en marcha diversas estrategias y medidas para lograr una transición ecológica en las carreteras españolas. Una de las principales estrategias es la promoción del uso de vehículos eléctricos y de combustibles alternativos, como el gas natural o el hidrógeno.
En consecuencia, se están llevando a cabo diversas iniciativas para fomentar la implantación de infraestructuras de recarga de vehículos eléctricos en las carreteras españolas. Una de las más destacadas es el Plan MOVEA, que ofrece ayudas económicas para la adquisición de vehículos eléctricos y la instalación de puntos de recarga. Esto favorece que los consumidores apuesten, cada vez más, por tecnologías limpias y respetuosas con el medio ambiente.
Además, se están impulsando medidas para fomentar el uso del transporte público y la movilidad sostenible. Para ello, se están ampliando y mejorando las redes de transporte público en las ciudades. La técnica de los micropilotes es una de las alternativas de cimentación utilizadas en las estructuras de estaciones con el fin de lograr su óptimo funcionamiento como canalizadores de los medios de transporte públicos. Otras opciones que se están promoviendo son iniciativas como el uso compartido de vehículos o el uso de la bicicleta en trayectos urbanos e interurbanos.
Otra de las estrategias para lograr la transición ecológica en el transporte español es la promoción de la eficiencia energética y la reducción de emisiones en el transporte de mercancías. En este sentido, se están impulsando medidas como la utilización de vehículos más eficientes, la optimización de las rutas de transporte o la mejora de los pavimentos industriales en los accesos y almacenes de mercancías, junto al uso de materiales más sostenibles.